Las muelas del juicio o cordales son unos terceros molares que aparecen, o no, entre los 18 y 20 años de edad. Normalmente hay una por cada cuadrante de la boca con un total de 4 muelas del juicio, sin embargo es habitual que no erupcionen todas o incluso que no erupcione ninguna dependiendo de si se han formado o no en el interior del hueso.
Al erupcionar, las muelas del juicio pueden causar dolor por falta de espacio, por esto a veces se recomienda extraerlas cuando todavía están incluidas en el hueso o cuando ya han semi-erupcionado pero causan dolor al empujar los dientes adyacentes en el proceso de erupción. Existen casos en los que las muelas salen sin ningún problema y sin dolor o sintomatología.
Las muelas del juicio suelen dar problemas debido a su posición, se encuentran al fondo de la boca y resulta incómodo llegar hasta ellas para poder limpiarlas. Es por esto que suelen acumular más bacterias y son más propensas a sufrir caries.
Además de caries pueden causar infecciones por acumulación de bacterias dado que normalmente las muelas quedan cubiertas por encía que no está adherida y pueden filtrar bacterias que pueden llegar a afectar al hueso y a las encías (periodontitis).
Se recomienda extraer las muelas del juicio cuando causen dolor o problemas como la movilidad de las piezas de al lado.
La extracción de las muelas del juicio es similar a la de cualquier otra pieza, sin embargo si las piezas están recubiertas por encía es posible que se deba hacer una pequeña incisión para poder extraerlas.
Es un tratamiento que no suele dar complicaciones, todo lo contrario, evita el dolor y las futuras molestias que las muelas puedan causar.
Existen algunos casos en el que las muelas se encuentran en posición perpendicular al resto de las piezas, estas reciben el nombre de muelas impactadas y son piezas que no pueden salir por la posición en la que se encuentran.
En caso de molestias o dolor se procederá a hacer un estudio radiográfico y si es posible extraerlas de manera quirúrgica.
Si las muelas del juicio salen sin problema y tenemos espacio en la boca para albergarla podemos conservarla siempre y cuando las mantengamos bien limpias y cuidadas.
Siempre que sufras dolor tanto en las muelas del juicio como en el resto de piezas debes intentar mantener la zona lo más limpia posible y acudir a la consulta a valorar cual es la mejor solución y que tratamiento es el adecuado.